viernes, octubre 21, 2005

Un marabarista de las palabras (un mentiroso, vamos)

Dice el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, que su propuesta de rebajar la indemnización por despido de 45 a 33 días por año trabajado no supone abaratar el despido, sino dotar de derechos "a quien hoy no los tiene", los parados y los trabajadores temporales. Es otra vuelta en la espiral del vendedor de humo. Este gobierno, digna plantilla para cualquier empresa de teletienda, sería capaz de vender por el módico precio de 99,99€ un klinex usado alegando que con la superpromoción obtendríamos, por el mismo precio, un magnífico klinex de papel reciclable y restos biológicos de incalculable valor procedentes de las inexploradas fosas nasales de un perfecto desconocido.

No pido que dejen de mentir con esa caradura. Comprendo que a mentirosos compulsivos como los que nos gobiernan (recordemos que este es el mismo Caldera que utiliza el tipex para alterar y falsificar informes oficiales) no pueden pasar un solo día sin largar otra de sus infumables barbaridades. Me conformo con que restrinjan sus melonadas al horario propio de los engañabobos de tómbola que pululan por los canales de televisión en la madrugada, cuando las personas que trabajamos ya estamos descansando para rendir al día siguiente en nuestros trabajos, gracias a lo cual cobran sus sueldos. Por lo menos que no nos insulten en la cara.