miércoles, julio 20, 2005

Trágicas mentiras de cortas patitas (3)

Máximo Díaz-Cano, consejero de Presidencia de la Junta de Castilla La Mancha: mentiroso. Rosario Arévalo, consejera de Medio Ambiente de la Junta de Castilla La Mancha: mentirosa. José María Barreda, presidente de la Junta de Castilla La Mancha: mentiroso. Maria Teresa Fernández de la Vega, vicepresienta del gobierno de España: mentirosa.

Basta con leer el informe de la Guardia Civil sobre el incendio desatado el pasado sábado en Guadalajara y que costó la vida a once miembros de un retén y quince mil hectáreas quemadas para que no quepan dudas sobre el término que mejor casa, junto con el de ineptos y soberbios, a cada uno de los responsables. Sobre las 18.30 horas, "se tiene conocimiento de un posible accidente de una motobomba". Una patrulla rural acompaña un vuelo de un helicóptero de extinción para reconocer la zona del posible accidente. Aprovecha una situación favorable para poner pie a tierra y reconocer. El helicóptero se queda sin combustible antes de que finalice el reconocimiento. La patrulla contrasta la existencia de al menos once cadáveres en la zona reconocida. Abandona por el incremento del riesgo.

A esta alturas ya solo me alcanzan dudas circunstanciales: ¿acudirá Angels Barcelò y el resto de la truppe mediatico-festiva a los funerales por las once víctimas del incendio? ¿Preguntará alguien algo en la rueda de prensa del próximo consejo de ministros o seguirán con el caldo gordo a esa señora esquelética por efecto del resentimiento que ejerce de vicepresidenta y portavoz del gobierno central? ¿Reprobará alguien a Alvarez Cascos por su responsabilidad política en la gestión del incendio o se enterarán de una vez que ahora gobiernan ellos?